Optimización de costos del proceso de embalaje laminado
Optimizar el coste del proceso de envasado laminado está estrechamente vinculado al volumen de tinta aplicado durante la impresión. Un control preciso del volumen de tinta garantiza una impresión de alta calidad en bolsas de fondo plano y mejora la velocidad de impresión. Controlar el volumen de tinta es clave para reducir de forma científica y razonable el coste de las bolsas de fondo plano. Los principios básicos de la aplicación de tinta son los siguientes:
- El volumen de tinta está determinado directamente por la profundidad de las celdas grabadas en el cilindro de impresión: las celdas más profundas requieren más tinta, mientras que las celdas más superficiales reducen el consumo de tinta.
- La viscosidad (concentración o espesor) de la tinta afecta su volumen. Una mayor viscosidad resulta en un mayor volumen de tinta, mientras que una menor viscosidad resulta en un menor volumen de tinta.
- La velocidad de impresión afecta la aplicación de tinta: las velocidades más rápidas disminuyen el uso de tinta, las velocidades más lentas requieren más tinta.
La profundidad de las celdas grabadas en el cilindro y la viscosidad (concentración o consistencia) de la tinta son los principales factores que influyen en el volumen de aplicación , así como en la velocidad de impresión. La viscosidad de la tinta se determina mediante medición, mientras que su espesor (o consistencia) se percibe visualmente. Aunque viscosidad y espesor no son exactamente lo mismo, están estrechamente relacionados. En la práctica, al medir con una copa de viscosidad o una copa Zahn, los resultados son inseparables. Generalmente, el espesor de la tinta puede usarse como referencia para la viscosidad: una alta viscosidad se denomina espesa y una baja viscosidad, fluida.
Cuando las celdas grabadas en el cilindro son profundas, se requiere tinta más espesa; de lo contrario, pueden aparecer imágenes fantasma . Por el contrario, si el patrón es superficial, se requiere tinta más líquida; de lo contrario, puede producirse una transferencia de tinta incompleta o la obstrucción de la plancha. Si la velocidad de impresión es alta, se requiere tinta más líquida para evitar problemas como la eliminación incompleta de la tinta, el corrimiento de tinta, las líneas de la cuchilla, la falta de tinta y el secado falso, todos ellos causados a menudo por una tinta demasiado espesa. Por otro lado, si la velocidad de impresión es lenta, se requiere tinta más líquida; de lo contrario, pueden aparecer marcas de agua en el material impreso.